jueves, 3 de febrero de 2011

Conceden casa por cárcel a Afiuni


Patty Fuentes Gimón
Por fin actuaron constitucionalmente. No se sabe si el Gobierno se asustó después de que el mundo entero se pronunciara a favor de María Lourdes Afiuni o si el juez Alí Paredes se vio obligado a actuar. El hecho es que ahora la jueza podrá seguir con su proceso penal desde su casa, lejos de la pequeña celda del INOF que la albergó durante los últimos trece meses.

Así lo acordó ayer en la tarde el Tribunal 23 de Juicio, después de que la fiscal Luisa Ortega Díaz formalizara la solicitud de concederle arresto domiciliario a Afiuni por su deteriorado estado de salud. Los abogados de la privada de libertad también habían requerido al mencionado tribunal que acordara una medida menos gravosa, ajustada a Derecho.

“Ha sido una batalla, hemos logrado simplemente una victoria. Esperábamos que privara la sensatez porque, hasta ahora, no habían tomado en cuenta que la jueza estaba sometida a una situación de tortura, amenazada de muerte y con precaria salud, además de que estaban pasando por encima de la presunción de su inocencia”, expresó José Amalio Graterol, defensor de la jueza.

El juez de la causa a su vez estableció una medida de presentación periódica cada ocho días ante el Tribunal y una prohibición de declarar a medios nacionales e internacionales sobre su caso, lo que para el abogado de la jueza resulta una restricción a la libertad de expresión.

Hoy podría ser operada
Afiuni fue trasladada ayer al oncológico Padre Machado, donde permanecerá hospitalizada hasta que, a través de exámenes médicos, se determine cuál será la fecha de su operación.

“En la biopsia pudimos ver que tiene engrosamiento y fibromatosis en el útero (patología tumoral benigna frecuente en el aparato genital femenino). Hay que hacerle una histerectomía total, es decir, habrá que extraerle el útero, pero primero el neumólogo tiene que ver sus condiciones físicas para decir si está preparada para la operación”, explicó el hermano de la jueza, Nelson Afiuni.

Graterol, por su parte, señaló que el oncólogo que trata a su defendida estima que la recuperación de la intervención quirúrgica puede ser de 30 a 35 días. “La salida del hospital depende de lo que digan los galenos del oncológico. Después de recuperarse, podrá irse para su casa”, añadió.

El hermano de la jueza 31 de Control asegura que en su vivienda estará mejor, pues su madre la atenderá a toda hora, su padre ya está retirado y, además, contará con la compañía de su única hija.

No hay comentarios: