Patty Fuentes Gimón
Venezuela tiene aproximadamente el mismo porcentaje de casos de violencia de género por habitantes que el resto del mundo. De acuerdo con Alba Carosio, coordinadora de investigación del Centro de Estudios de la Mujer de la UCV, las denuncias por eventos de este tipo se han mantenido en los últimos años alrededor de 50 mil en el país, lo que significa que se presentan anualmente 167 casos por cada 100 mil habitantes.
“La violencia de género es un problema de salud pública mundial. Las denuncias en Venezuela son más altas que las de otros países en números absolutos, pero no en proporción con el total de la población. Por ejemplo, está por debajo de países como España y no es de los más violentos de Latinoamérica”, explica Carosio.
Durante el primer semestre de este año, el Ministerio Público recibió 46.222 denuncias de violencia contra la mujer, según reveló el pasado miércoles la fiscal Luisa Ortega Díaz, quien también anunció que el próximo 13 de septiembre será instalada en Parque Central la Dirección para la Defensa de la Mujer que atenderá los delitos establecidos en la Ley Orgánica sobre el Derecho de la Mujer a una Vida Libre de Violencia, promulgada en 2007.
La presidenta de Avesa, Mercedes Muñoz, considera que “siempre va a ser difícil saber si es que ha aumentado el número de casos o es que la gente tiene más conciencia del problema, porque antes esto ocurría con la misma frecuencia pero la gente no se daba cuenta; ahora cada vez hay más conciencia de que esos actos constituyen delitos”.
Sin embargo, muchas mujeres siguen dejando de denunciar, sostiene Carosio, porque “no se animan, porque les parece que su problema entra en un ámbito de lo privado, porque tienen la esperanza de que se va a solucionar o porque buscan más ayuda psicológica que jurídica”.
Prevención antes del castigo
La investigadora del Centro de Estudios de la Mujer asegura que el Estado ha tomado medidas importantes para combatir la violencia de género. “De la Ley Orgánica sobre el Derecho de la Mujer a una Vida Libre de Violencia se ha desprendido la creación de 36 tribunales, de fiscalías y muchos seminarios. Falta camino por recorrer, pero ha habido un impulso grande”, aclara.
Al respecto, Muñoz opina que la norma jurídica ha contribuido pero “hay una brecha entre lo que dice la ley y lo que ofrece el Estado como alternativa a las víctimas. Este tema se quiere resolver sólo por la vía del castigo, pero además hay que centrarse en los derechos de las víctimas, atender a las mujeres que pasan por esa situación para que se recuperen y desarrollen capacidad de empoderarse para que no se repita”.
La presidenta de Avesa agrega que tampoco hay suficientes programas de prevención ni de enseñanza. “Hay una idea de que ciertas cosas se modifican por decreto o porque se hace una ley, pero hay que formar a su vez a los fiscales y a los jueces”, dice.
Ante esta situación, Carosio recomienda continuar aplicando los aspectos de la ley en materia educativa y cultural porque “el objetivo no es reprimir. Lo mejor para la violencia de género y para cualquier otro tipo de violencia es que no ocurra”.