Patty Fuentes Gimón
Para desarmar a la población se requiere de acciones conjuntas del Estado con todos los sectores del país. El diputado Juan Carlos Caldera, de la Comisión Mixta para el Desarme (de la Asamblea Nacional), sugiere propuestas como el canje de armas por oportunidades y la identificación por colores de las municiones.
–¿De qué trata el canje de armas por oportunidades?
–Es un plan anónimo y voluntario en el cual las personas entregan armas o municiones a cambio de oportunidades como beneficios de alimentación, vivienda, becas de estudio, cupos universitarios, empleo y materiales de construcción.
–Tomando en cuenta el valor que muchos venezolanos les dan a las armas, ¿considera usted realmente viable esta iniciativa?
–No es una tarea sencilla. Primero tenemos que ganarnos la opinión pública mediante una campaña de sensibilización. La posibilidad de que se tenga amnistía en la entrega de armas siempre es una ventaja. Sin embargo, también tiene que haber desarme compulsivo, tarea de los cuerpos de seguridad, para darle un golpe certero a la delincuencia organizada.
─¿Cuál es el planteamiento que hace la Comisión Mixta acerca de la identificación de las municiones?
–La idea es ponerles colores a las municiones para diferenciar las que usan la Fuerza Armada de las que usan los civiles o las policías. También queremos serializar las municiones para que se sepa a quién fueron vendidas y hacer el levantamiento del parque de armas de las policías.
Trabajo en equipo
La Comisión Presidencial y la Comisión Mixta para el Desarme deben ir de la mano. Aunque muchas de sus funciones están demarcadas, unas tantas otras son compartidas.
Caldera forma parte de ambas y asegura que no se puede “caer en guerra de protagonismos porque el país lo que está esperando es que se resuelva el problema”.
–¿Cree usted que existe contradicción entre las propuestas de las dos comisiones?
–No debería haber contradicción porque tienen competencias complementarias. La Comisión Presidencial tiene una labor de mediano y largo plazo, que es el diseño y desarrollo de una política pública en control de armas. La Comisión Mixta tiene una tarea única que es la redacción de la Ley para el Control de Armas, Municiones y Desarme.
–¿De cuáles otras funciones se encarga cada comisión?
–La Comisión Presidencial está haciendo investigaciones de las rutas de armas para llegar a un censo de armas ilegales. También revisa la normativa en la importación de armas, elabora una campaña de concientización y formación, y realiza una encuesta nacional. La Comisión de la AN redacta la ley. Lo que pasa es que la ley no va al detalle; permite el desarrollo de una política, pero al Gobierno le tocará la implementación de las políticas de desarme.
Cifras oscuras
Al preguntarle acerca de las cifras de armas ilegales en el país, Caldera señala que ese es uno de los grandes desafíos que tiene la Comisión Presidencial porque “hay cifras para todos los gustos… Unos hablan de 3 millones, otros de 5 y hasta de 12 millones. La verdad es que no tenemos un registro certero de eso. Sólo sabemos que están permisadas alrededor de 20 mil armas legales”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario